
La enfermedad neumocócica es un término que se usa para una amplia serie de infecciones causadas por las bacterias Streptococcus pneumoniae.

Los neumococos o estreptococos son bacterias de forma esférica que forman cadenas en forma de rosario.
Las infecciones provocadas por el neumococo siguen siendo una causa importante de discapacidad y mortalidad, sobre todo entre niños y adultos mayores.
¿CÓMO SE CONTAGIA?
Los signos y síntomas de la Hepatitis A aparecen generalmente después de haber tenido el virus durante algunas semanas:
Las personas pueden tener las bacterias en la nariz y la garganta sin estar enfermas y transmitirlas a otras personas.
El neumococo coloniza el interior de la nariz muy cerca de la garganta, desde ahí viaja por la circulación hasta sitios lejanos como el estómago, o hacia los oídos o pulmones, donde origina una infección.

El neumococo puede infectar casi cualquier órgano o parte del cuerpo, pero las enfermedades más frecuentes son:
- Otitis media (infección en el oído)
- Neumonía (infección en los pulmones)
- Bacteriemia (infección en la sangre)
- Meningitis (inflamación del tejido cerebral)


En los casos de meningitis o infecciones del torrente sanguíneo, se deberán tomar muestras de líquido cefalorraquídeo (líquido del interior de la columna vertebral) o de la sangre, estas muestras deberán analizarse en el laboratorio. En ciertos casos de neumonía, también se puede usar un análisis de orina para obtener un diagnóstico.

En ciertos casos, se presenta:

Tos de forma súbita

Fiebre

Dificultad para respirar

Escalofríos

Dolor muscular
¿CÓMO PREVENIR EL NEUMOCOCO?
Los rápidos y drásticos cambios en la propagación del neumococo en diversos países desarrollados impulsaron la aprobación de la vacuna conjugada contra el neumococo.
Las vacunas previenen ciertos tipos de neumonía y enfermedades respiratorias lo cual también es prevenir siguiendo reglas de higiene básicas como el lavado de manos y limpieza de superficies.

Los grupos vulnerables en los cuales se aplica la vacuna son:
- Niños mayores de 2 años
- Adultos de 65 años o más

Entre los adultos con mayor riesgo de infección, están aquellos que:
- Consumen alcohol en exceso
- Son fumadores

Y adultos con problemas como:
- Enfermedades del corazón
- Enfermedades del hígado
- Enfermedades de los riñones
- Enfermedades pulmonares crónicas
- Diabetes

